Si, en medio de la crisis económica actual, está sin trabajo y preguntándose en qué dirección van las cosas, no se desanime. Aquí hay unas ideas de mi propia experiencia en el trabajo que le pueden ayudar a encontrar un futuro próspero e interesante.
Hace muchos años llegué a un punto muerto en mi carrera, acababa de perder mi trabajo y estaba totalmente pelado. Aprendí una lección invalorable: que no importaba que tan mal las cosas estuvieran (y yo estaba en un punto en que humanamente no podía hacer nada porque la situación era terrible), aún así Dios pudo corregir toda la situación.
Esta demanda de tener que depender únicamente de Dios profundizó inmensamente mi confianza en Él y me ha bendecido desde entonces. Aprendí que si uno ha llegado a ese extremo, puede realmente alegrarse porque es hora de dejar que Dios revele todo el bien que esta a mano para usted así como Su infinito cuidado. La autoridad bíblica para este punto se encuentra en el segundo libro de Crónicas: “No habrá para qué peleéis vosotros en este caso; paraos, estad quietos, y ved la salvación de Jehová con vosotros.” (20:17)
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!